Friday, September 20, 2013

Noche Espectacular




                    Bajando del cielo Romano, continuamos sobre la vía del Corso, la peculiaridad de esta calle, es que es recta, pero no te salgas de ella porque todas las demás están retorcidas como la mente de Nerón.

Compramos unos sombreros para defendernos un poco del Sol, mi sombrero, heroico no sobrevivió al viaje, murió ahogado en las lluvias de París.  Comimos en un restaurante llamado "Dantes´s place", Ana una ensalada que más bien parecían cinco, yo un Panini.



Seguimos la ruta por vía del Corso para luego llegar al Panteón, Una agradable sorpresa fue encontrarnos con la iglesia de Ignacio de Loyola, la cual provoco un "Wow" al entrar y ver sus techos de un colorido, de esos lugares que no sabes a donde mirar...

Algunas fotos de la Iglesia San Ignacio de Loyola


El Pantéon es una iglesia en forma circular, y de gran tamaño, fuera de esta iglesia nos dieron un volante sobre una función de Opera  y Ballet, Ana de inmediato decidió cual sería nuestro plan para la noche.

Seguimos caminado hasta llegar otra vez a la fuente de Trevi, nos volvimos a impresionar, pero ahora la vista a toda luz. Con eso comprobamos que la leyenda era cierta, porque Ana un día anterior arrojo su moneda a la fuente, y si, regresamos!

De allí la búsqueda se volvió por un a estación de metro, para regresar un rato al hotel y descansar. Pudimos haber llegado caminando, pero teníamos un pase del metro para todo el día y teníamos que aprovecharlo.

Llegamos al hotel, y yo intente acostarme, pero antes de terminar de reposar mi cuerpo en la cama ya estaba roncando, no duro mucho el descanso, teníamos que encontrar el lugar del evento y trazar la ruta para llegar allí.

Volvimos a tomar el metro hacia el Coliseo, e hicimos casi el mismo recorrido de la mañana, que ya sin el Sol se hizo mas ligero, mucho más. Llegamos a comprar los boletos, y todavía faltaba unas horas para que empezara, así que nos fuimos a cenar, a uno de los muchos restaurantes de la zona, yo pedí una sopa de cebolla, que le faltaba algo de sabor junto a medio litro de vino tinto que me alegro la tarde, Ana una exquisita Lasaña..



Llegamos al lugar del recital, una iglesia evangelista, muy sencilla, esperamos unos momentos, el publico mayormente norteamericanos, uno que otro oriental y dos mexicanos.

La función empezó con una bienvenida en Italiano, inglés, francés, español, japones y algunos otros lenguajes orientales, por el maestro de ceremonia que resulto ser también uno de los tenores que participaron en el show.


Con un violín, una flauta, un Contrabajo y un piano, dos bailarines de ballet, dos tenores y una soprano, la noche nos empezó a envolver con una magia que hacia poner la piel chinita.

De regreso caminamos en una Roma fresca, donde las iluminaciones a sus edificios nos daban un espectáculo diferente, entre modernidad y antigüedad, y así terminamos este primer día en el viejo mundo.


No comments: